martes, 28 de octubre de 2014

Poster de Blackhat, lo nuevo de Michael Mann

Hace unos días os colgué el trailer de Blackhat, el nuevo thriller del siempre interesante Michael Mann, el rey del thriller (de acción o no) urbano, y aquí os traigo el poster:


La habitación del pánico (Panic Room, David Fincher, 2002)



La habitación del pánico es un punto de inflexión en la carrera de David Fincher. A partir de aquí, su estilo se depuró enormemente, dejando a un lado los jugueteos con la cámara, el apabullamiento visual a base de filigranas para convertirse en un narrador de primera, dejando que sea la propia historia la que atrapa al espectador, sin ayuda de malabarismos. No quiero decir que desde este título, Fincher haya dejado de ser uno de los directores más atractivos a nivel visual, porque eso sería falso, sino que a partir de ahora, la forma se someterá al fondo.

Como digo, Fincher se tomó este thriller de suspense, acerca de las vicisitudes de Meg, una madre recién divorciada, y Sarah, su hija diabética, la noche que estrenan su nueva casa en Manhattan, cuando un grupo de ladrones entra en ella y se ven obligados a refugiarse en una habitación del pánico, como un divertimento, un ejercicio de escapismo después del agotador rodaje que supuso Fight club (El club de la lucha, 1999): apenas hay un escenario en toda la película, la casa, quitando el inicio y el final, que están rodadas en la calle.

Pero aunque la intención de Fincher fue hacer algo ligerito, la producción tuvo muchos problemas, empezando por la sustitución de la inicialmente prevista Nicole Kidman como actriz principal debido a unos problemas en la rodilla, y siendo sustituida deprisa y corriendo (sólo 9 semanas antes del inicio del rodaje) por Jodie Foster, que además estaba embarazada de su segundo hijo, lo que obligó a trastocar el plan de rodaje.
Además, Fincher tuvo varios desencuentros con la distribuidora de la película, Columbia Pictures (Sony) a la hora de afrontar la promoción de la cinta, no sólo para su estreno cinematográfico, sino también para su edición en formatos domésticos. Y para colmo, se opuso a remontar la cinta cuando la MPAA se lo "recomendó" para recibir una calificación PG-13 y le endosaron una R por su contenido violento y su lenguaje malsonante (sic).

En fin, que dejando a un lado todas estas visicitudes, y centrándonos más en la propia cinta como tal, si algo queda claro, es que esta película es, quizás, el mayor exponente del Fincher malabarista. Esta cinta es una palomitada, sí, pero no es lo mismo una palomitada de Fincher que, digamos, el 99% de los directores americanos que se mueven por el sistema de Estudios. Fincher entiende el material con el que trabaja y lo enfoca de la únic amanera posible: lo formal por encima de todo. A fin de cuentas, no es más que un thriller de suspense sin subtexto de ninguna clase. Como digo, es un divertimento como la copa de un pino, con un manejo del ritmo y de la tensión, que va increscendo durante su (ajustado) metraje controlado de forma milimétrica... Vamos, todo marca de la casa. Y sobre este pastel, la guinda: movimientos de cámara por toda la casa, metiéndose entre los barrotes de las barandillas, suniendo desde el hall por cada piso, bajndo y retorciéndose en cerraduras, etc...

Sobre este aspecto, destacar el plano-secuencia "falsete" que se marca el amigo cuando los ladrones llegan a la casa y cómo la cámara les va siguiendo hasta que consiguen entrar desde la entrada principal, pasando por e patio y el tejado. He dicho antes que era un plano-secuencia "falsete" porque realmente hay cortes y ayuda de CGI para poder realizarlo, pero los cortes están perfectamente integrados y realizados aprovechando la arquitectura de la casa y los CGIs no cantan, dando una sensación muy real.
Pero no sólo de virguerías vive el hombre, y Fincher utiliza todo su creatividad a la hora de ir desarrollando una set piece tras otra con un excelente uso de la planificación y el montaje, creando secuencias llenas de tensión como el descubrimiento por parte de los ladrones de que hay gente viviendo y Meg descubriéndolos y sus esfuerzos por despertar a Sarah y llegar a la habitación del pánico antes que los ladrones, o toda la secuencia del gas y su resolución o toda la parte final, de un ritmo endiablo, pero de una tensión que va en ascenso de forma progresiva hasta el estallido final de violencia dura, seca y directa.

Foster está bien como Meg. Quiero decir que es consciente del papel que tiene entre manos y se nota que se lo pasó pipa rodando esta cinta con un personaje que va tomando un perfil badass bastante potente. Kirten Stewart no esta mal, lo cual ya es un logro (Fincher es muy bueno) y afortunadamente su personaje no requiere más de lo que hace. El resto de protagonistas también están cumplidores, al servicio de la película, siendo conscientes de donde están y de lo que se traen entre manos. 
Aquí están todos para pasárselo bien, cobrar el cheque y darse el gusto de trabajar con uno de los mejores directores con los que se puede trabajar en USA.

Como digo, La habitación del pánico es un divertimento excelente, una palomitada de calidad, en la que destaca sobre todo lo formal por encima del resto. No es que la cinta requiera más. Ni menos.

Muy buena.



viernes, 24 de octubre de 2014

Frikismo... Reportaje gráfico de Apocalypto Zavvi Exclusive Steelbook

Buen, aquí teneis unas cuantas fotos del steelbook exclusivo de las tiendas Zavvi de Apocalypto, infravalorada película de aventuras de Mel Gibson.

El steel tiene diseño interior, contraportada limpia y un tono brillante que le queda fenomenal. En cuanto a las características técnicas, el disco sigue siendo un port del disco USA pero bloqueado a Región B: audio V.O. codificado en LCPM y Dolby Digital 5.1 y subtítulos en inglés, inglés para sordos, francés y español (muy neutro).









miércoles, 22 de octubre de 2014

Perdida (Gone girl, David Ficher, 2014)




David Fincher es como el buen vino, según pasa el tiempo mejora, y Gone girl es una nueva muestra de que se está convirtiendo en uno de los mejores narradores del cine americano, donde la precisión milimétrica a nivel formal esconde capas y capas de subtexto, donde el género se convierte en una excusa para seguir desmenuzando al ser humano.

Sería interesante tomarse unas cervezas con él e intentar averiguar qué pasó en su vida, o lo que pasó por su cabeza entre 2001, cuando finalizó el rodaje de La habitación del pánico (Panic room, 2002) y 2004-05, cuando inició la pre-producción de Zodiac. Intento leer todas las entrevistas a las que se presta y nunca he visto que se le preguntara el por qué, los motivos de ese cambio tan brutal que dio su obra desde Zodiac, de esa reinvención como cineasta, de gran poderío visual, que le gustaba juguetear con la cámara, al cineasta contenido, pero que se sabe dominador de la narración y de todas sus técnicas, y que en vez de matar moscas a cañonazos (ojo, que también mola) ahora las mata con una fría y tenue luz azul (y de la que no puedes escapar).

Como digo, Perdida es otra muestra más en la evolución de Fincher como narrador, llevándolo hasta el extremo, utilizando las reglas del thriller para diseccionar una institución tan sagrada en el mundo occidental como el matrimonio, pero a la vez jugar con las imágenes y deseos que proyectamos sobre nuestra pareja y sobre nosotros mismos, bien por agradar o bien casi como obligación a consecuencia de lo que nos ocurre en nuestra vida desde la infancia. A todo esto, le añade el factor que juegan los medios de comunicación de masas como medios de guía y (en última instancia) adoctrinamiento de la sociedad, que forja su opinión (y por tanto, su veredicto) en base a lo que nos presentan, sin analizar si esos "hechos" o "datos" son reales o están manipulados; y como último apunte, la fascinación de la sociedad por lo morboso y el deseo de "los 15 minutos" de popularidad gracias a esos medios de comunicación de masas o las redes sociales.

Si la vemos como un "simple" thriller de misterio, Fincher demuestra su maestría como narrador, dosificando la información para que la historia avance, haciendo que la audiencia se vaya decantando hacia uno u otro lado en base a lo que vemos que ocurre en pantalla. Al principio de la película, cuando no es más que un thriller de misterio, los espectadores vamos a la par que el protagonista, Nick Dunne (Ben Affleck, maravilloso acierto de casting... Luego me explayo al respecto) al inicio de la desaparición de Amy (¡¡¡ Oscar para Rosamund Pike ya !!!!), pero según avanza la película y vamos siendo testigos de todo lo que Fincher quiere contarnos (en forma y fondo), aumenta un par de marchas la velocidad y ya no te suelta hasta el final. 

La cinta es un tour de force acerca las miserias humanas, algo común en la obra del director, aunque en este caso Fincher se ceba en algo tan cotidiano como el matrimonio y todo lo que se monta en estos días con casos como el de la película (o en la vida real, como lo que ocurrió con una chica en la pasada Feria de Málaga, cuando denunció una falsa violación en grupo... pero durante 3 días, los medios de comunicación lo trataron como si efectivamente fuera así, sin esperar a que la policía y la justicia actuaran), con una descripción de personajes brutal. 
Los protagonistas son Nick Dunne y Amy Elliot Dunne, una joven pareja de escritores que vive en Nueva York, y que a raíz de quedarse ambos en paro y por la enfermedad de la madre de Nick, ambos se mudan al pueblo de este, en el Medio Oeste, que es la antítesis de la gran ciudad y que está machacado por la crisis económica. Lo que en un principio era una relación idílica, perfecta, se va transformando lentamente en un infierno del que ambos no quieren/pueden escapar: Nick no pone término porque depende económicamente de Amy, y ésta no quiere ser la que ponga fin a la relación por orgullo y miedo a la sensación de fracaso, algo a lo que no está acostumbrada.
A raíz de la desaparición de Amy, empezamos a descubrir cómo es realmente Nick, interpretado muy eficazmente por Ben Affeck,  de quien Fincher saca petróleo, ya que no sólo se ha aprovechado de su vida real (todo ese pasado tortuoso con los medios de comunicación, su relación con Jennifer López, etc...) sino su más que conocida "inexpresividad", que aquí convierte en timidez o miseria moral según las circunstancias. Nick es un capullo, superado por los acontecimientos ya que el sentimiento de fracaso la atenaza. Nick intenta ser lo que no es para conquistar a Amy, pero en cuanto empieza a pasar el tiempo y la vida empieza a dar bofetones en forma de despido y muerte de la madre, Nick (que además está en su ambiente natural) empieza a dejarse llevar más y más, dejando morir la relación con Amy. Nick ha sido criado junto a su hermana por su madre ya que la relación con su padre en inexistente. En cierta forma, Nick se ve superado por las mujeres, y sólo se ve cómodo con su amante, una chica de veintipocos años
Amy, maravillosamente interpretada por Rosamund Pike, es también la viva imagen del éxito: hija de padres famosos y ricos gracias a una serie de libros súper-ventas basados en ella misma, pero Amy realmente es presa de esa imagen, y la necesidad de mantener el tipo la quema por dentro. Realmente ella no quiere estar atada a todos los convencionalismos a los que se debe (look, relaciones) pero "se ve obligada" por la fama que la precede. La interpretación de Pike, como digo, es espectacular, con un tono frío constante, perfectamente acorde a lo que el personaje va requiriendo.

Según avanza la película, y a la vez que vamos viendo cómo es relamente el personaje de Nick, descubrimos el plan de Amy, pura vendetta por la infidelidad de su marido, pero ese plan es tan retorcido y maquiavélico, jugando con la aproximación de los medios de comunicación al tema según como ella lo quisiera presentar, que incluso por momentos, el espectador puede querer estar al lado de Nick... Pero no hay que olvidar lo pusilámine y capullo que es Nick. Ambos son unos cobardes, peor motivos diferentes, pero les llevan al mismo problema.

Fincher sigue en plena forma, rodando como Dios, con una planificación y puesta en escena perfectas, y un montaje afilado. La cumbre de la cinta es la secuencia del asesinato de Desi, donde la dirección y planificación de Fincher, la actuación, el montaje y la banda sonora alcanzan el cúlmen. Mejor no se puede hacer. Una de las secuencias del año, sino LA SECUENCIA. 

Como siempre cuando hablamos de Fincher, el apartado técnico es impecable, con una fotografía a cargo de Jeff Cronwelth que presenta imágenes poderosas, algunas por bellas (la lluvia de azúcar) y otras por terroríficas (la secuencia del asesinato de Desi) y una banda sonora a cargo de Ross y Reznor atmosférica y que casa perfectamente con las imágenes.

Al igual que ocurrió con La isla mínima, perfecto ejemplo de comunión entre espectáculo/entretenimiento y arte/subtexto. Las mejores películas del año.

Excepcional película.









viernes, 17 de octubre de 2014

Frikismo... Reportaje gráfico de Gone Baby Gone Zavvi Exclusive Steelbook

Bueno, he recibido esta mañana el steelbook exclusivo de la tienda Zavvi (con artwork exclusivo a nivel mundial) y limitado a 2000 copias de ese peliculón d eBen Affleck llamado Gone Baby Gone (en España titulado Adiós, pequeña adiós).

El steelbook incluye la pista V.O. en inglés PCM 5.1 y Dolby Digital 5.1, alemán DTS 5.1 y Dolby Digital 5.1 y francés Dolby Digital 5.1, además de subs en inglés para sordos, alemán y francés.

Muy bonito el steelbook, con acabado brillante. Aquí os dejo las fotos:










Trailer de lo nuevo de Ron Howard: In the heart of the sea

En marzo de 2015 se estrena lo nuevo de Ron Howard, una cinta de aventuras que nos cuenta la historia de barco Essex, cuyas aventuras en 1819 para cazar a una gran ballena originaron "Moby Dick".


martes, 14 de octubre de 2014

La isla mínima (Alberto Rodríguez, 2014)



Creo que hacía mucho tiempo que no salía tan satisfecho de una sala de cine en cuanto a comunión entre arte y entretenimiento, entre forma y fondo/subtexto. Con esta cinta, y con su anterior obra (Grupo 7, un thriller de acción puro y duro, muy seco y directo), Alberto Rodríguez se ha convertido en un cineasta que ha sido capaz de utilizar el esquema del cine de género para ofrecernos una disección de un tiempo y un lugar que parecen lejanos, pero que están más cerca de lo que parece.

La acción arranca a mediados de septiembre de 1980 en un pueblo de las marismas del Guadalquivir, con la democracia recién estrenada y conocemos a Pedro (Raúl Arévalo) y a Juan (Javier Gutiérrez), dos policías "desterrados" de Madrid, y que tienen que esclarecer la desaparición de dos chicas del pueblo durante las fiestas. Según avanza la investigación, irán descubriendo no sólo el ambiente tan  cerrado y opresivo del pueblo, sino también miedos y facetas ocultas de ellos mismos... Cosas que realmente harán que tengan miedo no sólo de lo que les rodea, sino de ellos mismos, especialmente Pedro.

Ya los los planos cenitales (de una belleza impresionante, y que recuerdan en algún momento al cerebro humano) durante los créditos iniciales y el empleo de la música, nos meten de lleno en el ambiente pantanoso (físico/geográfico y psicológico) por el que se moverán los personajes, en un retrato de un pueblo aislado, de la España profunda absolutamente brutal, donde el miedo y el silencio tratan de ahogar los incipientes pasos a nivel social, económico y social.

La película se disfraza de thriller, y utiliza sus mecanismos para mostrarnos la dualidad de España en esa época, con Pedro como el joven e idealista policía, destinado a este rincón olvidado del país por escribir una carta a un periódico donde criticaba a un general y a Juan, un policía que viene de la dictadura, y por lo tanto, "molesto" de tener por Madrid en esos inicios de la democracia. Lo cojonudo de la cinta es el desarrollo de los personajes, y cómo Alberto Rodríguez nos deja pegados al asiento con un final en el que te dejan claro lo hipócrita que es/somo como país: mientras que Pedro se va viendo superado por la situación y recurre a métodos poco democráticos para ir avanzando en la investigación (por ejemplo, cuando llega a un acuerdo bajo cuerda con el periodista para saber qué tipo de película, dónde se vende y quién la ha comprado), Juan siempre se muestra, de cara a los demás, tranquilo, seguro y confiado. Los demonios van por dentro. Son suyos y los ahoga todas las noches entre cerveza y ginebras. Juan sólo explota en momentos puntuales, además perfectamente comprensibles, y siempre consigue que tanto los espectadores como el resto de los personajes lo veamos cómo él quiere ser visto.
Y Pedro (ergo, la incipiente democracia) tiene que recurrir a la ayuda de Juan (es decir, la dictadura) para solucionar el caso. Ahí radica el golpe maestro de Alberto Gutiérrez: no queremos mancharnos las manos porque nos gusta cogérnosla con papel de fumar, y tenemos que recurrir a los apestados para que nos solucionen los problemas de la única manera posible, porque "legalmente" no podemos hacerlo de otra forma.

Y eso sin contar con la revelación final sobre Juan, que da sentido a la maravillosa interpretación de Javier Gutiérrez, que literalmente se transforma en Juan, en una interpretación milimétrica, perfectamente ajustada a lo que requiere la historia. Sobria. Sutil. Perfecta.
A su lado, cualquier miembro del reparto parece poca cosa, y quizás perjudique sobre todo a Raúl Arévalo, que comparte muchos planos con él. No creo que su interpretación sea floja, ni mucho menos, pero es que cuando tienes a tu lado un tipo que con su personaje se come la película entera, cualquier otra cosa sabe a poco.

El trabajo de Alberto Rodríguez en cuanto a planificación y puesta en escena es magnífico. El tío sabe dónde colocar a los actores, cómo mover la cámara y donde cortar el plano. La cinta tiene un ritmo, en general, pausado, acorde al ámbito geográfico donde se mueve la historia, donde parece que todo está quieto, nada parece que avance, y cuando tiene que meter la quinta, sin problemas y a fondo (la persecución nocturna del Dyan 6, por ejemplo).

El resto de apartados brillan igualmente a gran nivel, como la banda sonora o el diseño de producción, perfectos. Pero si hay algo que también destaque por encima del resto es la fotografía de Alex Catalán, que consigue imágenes de una belleza absoluta, y no sólo con los planos cenitales, (aunque hay uno que destaca sobre el resto: el plano cenital que cierra el desenlace de la trama (que no de la cinta), lloviendo... Precioso), sino también con planos nocturnos de la carretera (genial el uso y empleo de las luces de los coches) o con la secuencia bajo la lluvia en las marismas.

En definitiva, una grandísima película. Absolutamente recomendable.

lunes, 13 de octubre de 2014

Frikismo... Reportaje gráfico de Edge of Tomorrow Target Exclusive Steelbook

Bueno, pues he recibido esta mañana desde USA el steelbook exclusivo de las tiendas Target de la película Edge of Tomorrow (Al filo del mañana), que como he comentado más de una vez, ha sido junto Dawn of the planet of the apes (El amanecer del planeta de los simios) de lo mejorcito que he visto en cines durante el verano de 2014.

Esta edición incluye el Blu-Ray con la versión 2D de la película, el DVD de la película y la posibilidad de la copia digital (que fuera de USA no sirve de nada).

El disco Blu-Ray es Region Free e incluye, además de la pista de audio V.O. en DTS HD Master Audio 7.1, audio y subs en español latino y francés quebequés. La copia en DVD está bloqueada a Region 1 e incluye la misma configuración d eaudio y subs.

Os dejo las fotos:











En Europa varios países disponen del steelbook, todos con la versión 2D y 3D, y con un "3D" en la carátula que la arruina completamente (puta manía de Warner en Europa de, al incluir la versión 3D, anunciarla como si fuera el título de la película... Esto lo ha hecho también con Man of Steel, Pacific Rim y Gravity).

El único steelbook en Europa con doblaje  subtítulos castellanos es el británico, pero esta edición es exclusiva en UK de las tiendas HMV.

Edición molona para una peli que mola.

viernes, 10 de octubre de 2014

Teaser trailer de Tomorrowland

Ya tenemos teaser para Tomorrowland, la nueva cinta de Brad Bird después d edebutar en el cine de imagen real con Mission: Impossible. Ghost Protocol hará 3 años.

En Tomorrowland, seguiremos la historia de una joven que, gracias a un pin mágico, puede acceder a un mundo extraordinario. Este hecho la pone en contacto con un científico (George Clooney), que tuvo una estrecha relación con ese mundo, ahora controlado por un antiguo compañero (Hugh Laurie).

El guión ha sido escrito por Damon Lindelof y Jeff Jensen.


jueves, 9 de octubre de 2014

Y lo más mejor de la temporada veraniega ha sido...

Pues sí, ya estamos en la temporada otoñal... Ya sabeís: llueve, se les caen las hojas a los árboles, empiezan a estrenarse las películas con aspiraciones a lograr los premios, etc, etc, etc...

Y como ya se ha acabado el verano, os pongo mis impresiones acerca de las dos cintas que me han parecido de lo mejor que se ha estrenado entre mayo y septiembre (a falta de ver Boyhood, que esta me la dejo para casa con el BD).

Y las cintas ganadoras han sido...

Tachán...

Redoble de tambores...




Pues sí, por honestas, divertidas y entender el producto que tienen entre manos. ¿Blockbusters? Por supuesto, como no podía ser de otra forma, pero por todas las características que he descrito antes, me han parecido lo mejor de la temporada de blockbusters por excelencia: el verano.

Porque ya se sabe, con el calor, mola estar en un cine fresquito, con un cubo de palomitas y que te entretengan pero sin faltar al respeto ni nuestra inteligencia.

Bueno, manos a la obra:


1.- Al filo del mañana 

(Edge of tomorrow, Doug Liman, 2014)



Palomitada pero que muy decente, una mezcolanza de géneros (bélico, ciencia ficción) que toma elementos de varias cintas, como Salvar al soldado Ryan (desembarco en Normandía y forma de presentar ese desembarco en pantalla... Bueno, y en la peli se da a entender que todo ocurre en Europa, y los humanos tienen que volver a invadirla a través de Francia -ejércitos o miembros de una alianza de países occidentales- mientras que se supone que Rusia y China luchan contra estos extraterrestres en el frente oriental europeo), Atrapado en el tiempo (Cruise reinicia el día del desembarco una y otra vez... sólo que esta vez lo hace cada vez que muere, dando lugar a momentos muy divertidos de humor negro, muy agradecidos por otra parte) e incluso Starship Troopers y algo de Pacific Rim (guerra contra unos invasores alienígenas -seres de otra dimensión en el caso de la cinta de Del Toro-, sin ser bichos exactamente, pero el tema de la conexión mental está muy presente en esas cintas).

Pero como digo, esa mezcolanza está muy bien construida, con un guión con un ritmo que nunca decae y en el que los guionistas se han preocupado de dar un cierto empaque a la relación entre los dos personajes protagonistas. Ojo, no digo que sea un estudio psicológico profundo, pero como digo, hace que te intereses por ellos y por su historia, y hay muy buena química entre ambos. Otro punto a favor es lo bien resuelto que está para que los protagonistas, dentro del bucle temporal, salgan de la playa donde han desembarcado, lo cual evita el aburrimiento por repetición y permite respirar a la cinta, cosa que en el caso de Atrapado en el tiempo no ocurría, al pasar todo en el pueblo, una y otra vez. Ah, y el humor negro, negrísimo con ciertas muertes, y especialmente algunas de Cruise, muy bueno y muy poco corriente en este tipo de blockbusters. Otro acierto.
Ah, y destacaría a Bil Paxton, pasándoselo bomba con su papel, y homenajeando a Al Mathews y su sargento Apone (sólo le faltaba el puro).

El aspecto visual del film destaca y mucho. El diseño de las armaduras y los aliens están muy bien resueltos, aunque es verdad que aquí sí que vienen a la mente títulos como las secuelas de Matrix (los Centinelas y las armaduras que llevan en Sión) y el tramo final en la presa (con esos pasillos iluminados por bengalas, visualmente excelentes (aunque recuerden a Aliens y su paseo de Ripley por el sub-nivel 3) y ese París inundado están fenomenal y a mí me han gustado mucho.

Destacaría la labor de Doug Liman en la dirección: enérgica, dotada de ritmo y visualmente muy buena. Se nota que ha creído en esta película, y que le han dejado trabajar. Liman no es la panacea, pero es un machaca de los grandes estudios para los blockbusters bastante competente, sobre todo si tiene un guión más trabajado que la media entre manos (El caso Bourne está fenomenal, pero Sr. & Sra. Smith es un guilty pleasure delicioso, y con más mala ostia de la que te puedes esperar en ese tipo de cine producido por un gran Estudio).

En resumen: divertimento perfecto. Ágil, divertido, con ritmo y humor. Los actores están fenomenal en sus respectivos papeles, hay humor, pero negro, lo cual es de agradecer... Lo único malo, en mi opinión, son los últimos dos minutos, con ese happy ending que, personalmente, yo no hubiera incluido, aunque entiendo que aparezca. 

Pero vamos, que la peli mola. No se me ocurre mejor definición.


2.- El amanecer del planeta de los simios

(Dawn of the planet of the apes, Matt Reeves, 2014)



Excelente película, que quiere ir más allá de los límites del cine de aventuras de enorme presupuesto, y que tiene unos responsables lo suficientemente inteligentes como para darse cuenta que, cuando el desarrollo de las ideas que hacen que la cinta salga de los parámetros de este tipo de blockbusters no den más de sí, tiren por la aventura pura y dura pero sin intentar avasallar al espectador.

La verdad es que estoy un poco perruno y no me apetece escribir mucho... Prefiero masticar la peli en mi cabeza y disfrutarla así, pero es, de largo, la mejor propuesta que los grandes Estudios de Hollywood han hecho en lo que llevamos de año (por encima de Al filo del mañana, que es tremendamente entretenida y honesta, pero que no tiene ciertos planteamientos y dilemas -ni falta que le hace, por otro lado- que sí tiene este Amanecer del planeta...). Sorprende que un Estudio con fama de tocapelotas a la hora de producir sus blockbusters como Fox, haya optado por confiar en los responsables de El origen del... como El amanecer del... y les hayan dejado hacer su trabajo, confiando en su buen hacer y respetando sus decisiones, sin imponer salidas de tono (o sacadas de chorra) en forma de megasecuencias de VFX para atronar al espectador, y se hayan decidido por avanzar hacia adelante con los simios, dándoles todo el protagonismo y verles evolucionar, sufrir con ellos y ver como al final son unos losers, que lo único que querían era vivir en paz y que les dejasen a su bola, y acaban siendo los "malos" por culpa de ellos mismos... Como acaban convirtiéndose en "humanos", víctimas de las traiciones políticas, maquinaciones y de manipulaciones para llevar a cabo vendettas personales.

En relación a esto último, muy interesante el giro que toma la historia, por cuanto César asume, con todo el dolor de su corazón, que tienen que ir a la defensiva a partir de ahora. Que para los humanos, los simios son los que iniciaron la guerra y que nada ni nadie les hará pensar lo contrario. El pesimismo de sus palabras, junto a sus "actuación corporal" (ole, ole y ole por Serkis... Y por Weta, que están llegando a unos puntos de perfección cuasi absoluta) le otorga como el peso de la "derrota" le está haciendo mella, y será muy interesante ver cómo plantean la historia a partir de ahora, con esa sensación de "huída" que tiene César... De que son los "malos", lo que siempre habían intentado evitar ser.

Es cierto, llegado a este punto, que hay que señalar que, si bien se plantean dilemas morales y situaciones que se salen del típico blockbuster, Reeves, Jaffa y demás responsables de la cinta son lo suficientemente listos como para "no pasarse de listos" y que no se les vaya de las manos la película. Quiero decir que, al igual que El origen del..., este Amanecer del planeta... es, en el fondo, una película sencilla (que no simple), que sabe por donde tirar para conectar al espectador con la historia de César, que es lo que realmente importa, y por eso, deciden no "complicarse" la vida a la hora de decidir quién es el "malo" de la película. Es decir, como llegado a un determinado punto, la escalada de tensión sinsentido, propia del miedo mutuo que sienten ambas partes, Reeves & Co deciden que sea un personaje muy concreto, que puede justificar sus actos, pero al fin y al cabo es alguien tangible, que "puede" cargar con la culpa de ser el detonante de la guerra, que es algo mucho más sencillo, pero no hay que olvidar que esto, en el fondo, es un blockbuster, y no hay que pedir peras al olmo. No es un fallo de guión, no es que el guión esté más o menos trabajado, porque todo está muy bien hilado, pero es verdad que para el funcionamiento de la cinta, es la mejor opción, y la que permite que pasemos de un cuasi documental (maravillosos primeros 30 minutos, al nivel de los primeros 25 minutos de Wall-E o Up) + drama familiar a la cinta de aventuras. y como digo, es un movimiento más sencillo que funciona a la perfección, porque es lo que pide la cinta (un movimiento, como digo, muy inteligente por parte de los responsables de la cinta). 

Como digo, el guión está muy bien construído, y creo que Reeves es consciente que tras esos primeros 30 minutos de cuasi documental lo iba a tener complicado para mantener el nivel, y por eso se decanta por el drama familiar y las relaciones entre los simios, antes de pasar a la parte aventurera, y me gustaría destacar un par de secuencias, que a mi entender tienen más mala ostia de lo que aparentan. En ambas, el protagonista es Koba, el lugarteniente de César... Y en ambas, para lograr su objetivo (en la primera escapar de un par de humanos armados y en la segunda conseguir una ametralladora y matar a esos mismos humanos), el simio decide "hacer el mono" (= hacerse el tonto) para engañar a los humanos, con una falsa sensación de superioridad sobre el simio... Me pareció muy buena por concepto (¿Quién es el simio y quién el humano?; Koba llega a un puto de abstracción mental en la cual sabe que si se hace el tonto, si se "autodegrada" conseguirá salir airoso de la situación, lo cual denota un nivel de inteligencia enorme) y por cómo está planteada y resuelta por Reeves, ya que dota de cierto humor a unas secuencias en las que la tensión sigue latente (gracias también al guión y al actor que da vida a Koba).

Por cierto, hablando de Reeves... Ha planteado una cinta muy clásica, en cuanto a estructura y puesta en escena, aunque demuestra virtuosismo con un cuasi plano secuencia, muy espectacular por el tiro de cámara. Tras Monstruoso y su remake de Déjame entrar, y ahora este Amanecer del... este chico tiene mucho futuro.

Y no quiero terminar sin destacar el diseño de producción (excelente), la BSO de Giacchino (no me la quito de la cabeza, y casa a la perfección con el tono del film) y los VFX, que son PERFECTOS. No hay otra forma de calificarlos.

Un excelente film.

martes, 7 de octubre de 2014

El niño (Daniel Monzón, 2014)



Daniel Monzón es un tipo que tiene las cosas claras. Sabe lo que quiere y cómo lo quiere, y eso se nota. Y se está demostrando como un director muy válido para un género que no se suele prodigar mucho en el cine español, el cine de acción. Pero el cine de acción de verdad, no el de meter tropecientas explosiones porque sí, montar la película con planos cuya duración máxima sea de un par de segundos y contratar a un operador de cámara con Parkinson (para eso ya tenemos muchos ejemplos en el cine, sobre todo estadounidense).

No, el cine de acción de Monzón es uno basado en los personajes y la historia, donde hay tipos con algo que contar(nos) y la historia es la verdadera fuente de la acción (es la acción en sí).

Podrá luego salirle más o menos bien (que en mi opinión sí son cintas muy conseguidas... No perfectas, pero sí muy notables), pero como digo, esa honestidad a la hora de contarnos la historia, el cómo, y el tener las ideas muy claras hace que sea de agradecer que aún hay gente que se toma el género con seriedad y utilizando temas propios españoles para desarrollarlo.

Celda 211 era una cinta de acción donde, a raíz del motín carcelario, nos presentaron a uno de los personajes que, a mi jucio, se ha convertido en un icono del cine español: Malamadre (Luis Tosar en estado puro) y nos presenta pinceladas del conflicto de ETA, el trato a los presos y el día a día en una cárcel.

Ahora, con El niño, Monzón nos presenta, con un muy Michael Mann style, el tráfico de drogas en el Estrecho de Gibraltar, tema poco conocido salvo que vivas en la zona puesto que los responsables se han curado muy mucho de que sus problemas y conflictos no salgan a la luz pública, y donde hay muchos niveles.

Aquí vemos en dos historias que van en paralelo, pero debido a los avatares y desarrollo de la historia, se entrecruzan: por un lado tenemos a un policía solitario, Jesús (interpretado por Luis Tosar), obsesionado con su trabajo, con ganas de hacer algo que merezca la pena y a la vez intentado que no le torpedeen desde dentro, y por otro lado tenemos la historia de El Níño, un chaval que sobrevive gracia sa pequeños trabajillos, pero que gracias a su habilidad con las motos de agua y las lanchas motoras acaba entrando en el tráfico de droga entre Marruecos y España.

Como he comentado antes, durante la proyección de la película no paraba de relacionar esta cinta con los thrillers urbanos de Michael Mann, tanto el look de la película, como por el guión, cómo se desarrolla éste y por los personajes que nos presenta y cómo evolucionan.
En cuanto a las similitudes formales, obviamente destaca el look de las secuencias nocturnas, muy digital, y con la planificación y puesta en escena, con primeros planos y encuadres que buscan el formato cuasi-documental (como por ejemplo en la secuencia en la que Jesús y Eva están en el coche de ésta, oyendo una conversación grabada a El Inglés que afecta a Jesús; o la persecución nocturna entre la lancha del Niño y el helicóptero de la policía; o cuando el Niño, el Compi y Halil cruzan la frontera de Ceuta en busca de Amina, hermana de Halil que les ayudará en sus comienzos pasando droga por el Estrecho). Esta es una cinta con un trabajo técnico (excepto un plano en la playa, cuando están el Niño y Amina besándose, donde la iluminación canta por soleares) muy bueno, de muy alto nivel.
Respecto al guión, hay dos tramas bien diferenciadas, que aunque en principio jamás estarían destinadas a encontrarse, acaban chocando de frente. La trama que sigue a Jesús y la policía sigue el patrón michaelmannesco con personaje principal solitario pero obstinado en seguir hasta el final, cueste lo que cueste y caiga quien caiga, al que le rodean compañeros tan abnegados y entregados a la causa como él (¿O no?) pero que realmente son más un complemento del personaje de Jesús que personajes con peso propio en la historia (exceptuando el personaje de Eva, compañera de Jesús), mientras que por otro lado tenemos al Niño, personaje igual de obstinado y decidido a hacer lo que haga falta con tal de lograr su objetivo (al principio simplemente sacar unos miles de euros pasando droga y luego intentar salvar la vida del Compi).
Ambos personajes son dos fuerzas destinadas a chocar, donde sólo puede quedar uno de los dos, pero que al fin y al cabo, están de la mitad para abajo en el mundo de la droga, con personajes en la sombra muchos más poderosos que se les escapan. Aún así, tanto Jesús como el Niño consiguen una victoria pírrica (no es un happy ending ni mucho menos... Es agridulce... Un sí pero no).

En los debes de la cinta, tengo que señalar que la trama amorosa entre el Niño y Amina, sin estar mal desarrollada, sí que está un poco forzada dentro de la historia. No es algo descabellado, pero es una concesión muy hollywoodiense de la cinta, puesto que así hay interés amoroso, pero tampoco es que sea el motor desencadenante del desenlace (afortunadamente). No molesta, pero a lo mejor replanteando la situación desde el guión se hubiera podido reconducir con otros personajes y aligerar algo el metraje.

El trabajo de los actores es, en general, muy bueno. Destaca sobre todo Luis Tosar, por presencia y carisma en pantalla. Su contrapunto en la historia, El Niño, interpretado por Jesús Castro, cumple, sin destacar ni por bueno ni por malo. Es verdad que le queda un trecho y tablas, y su mirada le condiciona para esa pose de niño malote pero en el fondo buenazo, pero no me ha parecido, ni mucho menos, que su trabajo sea malo.
El resto de actores cumple con solvencia y profesionalidad. Como digo, tampoco requeiren sus papeles de más que eso: profesionalidad y presencia, pero como digo, ahí están y cumplen su cometido a la perfección.
Me ha parecido curioso lo de Ian McShane como El Inglés. Tengo la sensación que su trama ha sufrido cortes, puesto que hubiera dado igual contratar a McShane (un actor como la copa de un pino) que al primer inglés que pasara por allí y incluso a un actor español, puesto que el personaje de El Inglés no cruza ningún diálogo con ningún personaje de la película. Es verdad que su presencia es muy física, pero me ha dado la sensación de actor y personaje desaprovechados, vista la calidad del actor que lo interpreta y lo que vemos del personaje en pantalla.

Como digo, un buen thriller, dirigido con pulso y brío, entretenido y muy minucioso a la hora de reconstruir el tráfico de drogas en el Estrecho, con las ramificaciones que implica.

Recomendable.



viernes, 3 de octubre de 2014

Ya tenemos poster y trailer para lo nuevo de Eastwood: American Sniper

Ya tenemos el primer poster y trailer de American Sniper, el nuevo filme de Clint Eastwood, donde nos cuenta la historia de Chris Kyle, considerado el francotirador más letal del ejército estadounidense.

Se estrena en USA de forma limitada el próximo 25 de Diciembre para garantizar su carrera por algún Oscar, y según imdb.com, hasta finales de Febrero no llegará a España.





jueves, 2 de octubre de 2014

Her (Spike Jonze, 2014)



Vista por primera vez esta mañana la película, y no se me va de la cabeza. Te deja planchado y no te suelta. Las imágenes y el poso que deja te da vueltas en la cabeza y no paras de preguntarte cosas.

Her me ha parecido, junto a Django desencadenado y The Master, la mejor película del pasado 2013: visualmente poderosa, temáticamente interesante y polémica, es una fábula, una reflexión no sólo sobre las relaciones humanas y el amor y la tecnología, sino lo que tus propias aspiraciones y tu forma de ser afectan a tu vida y su desarrollo.

Ambientada en Los Ángeles en un futuro no muy lejano, Her nos cuenta la historia de Theodore, maravillosamente interpretado por Joaquin Phoenix, que, ironías de la vida, se dedica a escribir cartas de amor para otra gente pero está anímicamente destrozado ya que su matrimonio ha fracasado. Un día, compra un Sistema Operativo nuevo, que se vende como una inteligencia artificial intuitiva, personalizada para cada usuario. Y así, descubre que "Samantha", su SO con voz femenina es inteligente, perspicaz, sorprendente y divertida... Y acaban enamorándose.

Dicho así, esto podía haber sido un WTF en toda regla, pero lo que podría haber sido la idea más loca parida por Hollywood en los últimos años, resulta ser una de las historias de "amor" o mejor dicho, "desamor", más desgarradoras, y un estudio de las relaciones humanas respecto a sus sentimientos y deseos tanto hacia uno mismo como hacia los demás.

Lo primero que destaca de la cinta es su aspecto visual, donde destaca sobremanera el diseño de producción y la dirección de fotografía. Aunque la historia se desarrolla en Los Angeles, y hay planos donde es reconocible, se mezclan planos del skyline de Shangai, en un deliberado intento por deslocalizar geográficamente la historia y hacerla más universal. Además, la fotografía de Hoyte van Hoytema, con planos amplios y ligeramente "descolocados" (similar a lo que hizo James Wan en The Conjuring) de la línea visual cuando el protagonista está en el exterior y planos muy cerrados cuando los protagonistas hablan entre ellos, y el uso de los colores para acompañar a los personajes hacen de este trabajo una delicia para los ojos.

Joaquin Phoenix ha hecho un trabajo en esta película absolutamente maravilloso, actuando con su voz, mirada y cuerpo (en este aspecto destaca la secuencia de la "prostituta", donde nos hace sentir lo incómodo de la situación y lo incómodo que se siente en ella). Este tío es un grande, un actor top como diría cierto entrenador de fútbol portugués, capaz de variar de registro y hacer cada personaje suyo, transformándose en él, y no simplemente representándolo. La sensación de vacío, tristeza, felicidad, etc... que vive su personaje es absolutamente real.

El contrapunto principal de Joaquin Phoenix y su Theodore es Samantha, interpretada por Scarlett Johansson. Papel muy difícil, puesto que al ser el OS, sólo oímos su voz, por lo que el guión tiene que ser muy medido y la interpretación de la actriz vital para hacer creíble el papel... Y lo logra, De hecho, para mí, este es su mejor papel junto con Lost in translation, película con la que Her guarda ciertos parecidos temáticos. Cada frase es interpretada por la actriz de forma perfecta, las inflexiones de la voz, las pausas... Todo hace que Samantha sea creíble y te puedas creer la historia (aunque Jonze pudo "hacer trampa" y al contratar a la Johansson, instintivamente la estás imaginando cada vez que Samantha "aparece" en pantalla). Sensual, divertida, afligida... Todos y cada uno de los registros que tiene Samantha lo clava. Maravillosa.

Además, hay otros 2 personajes femeninos importantes sobre los que pivota Theodore: su amiga Amy (Amy Adams) y su ex mujer Catherine (Rooney Mara). 

Amy y su relación con ella vendría a ser la redención de Theodore (y de la propia Amy), de intentar confiar más en el prójimo, de dar una oportunidad al ser humano, de tirar para adelante y no ser tan egoístas (que en el fondo, más o menos, es lo que consiste una relación) en cuanto que tu pareja es algo exclusivo o algo de propiedad.

Su ex mujer es el dolor (la secuencia de la firma de los papeles del divorcio es, simplemente, desgarradora, por el guión, por la dirección de Jonze, el montaje paralelo y las interpretaciones de ambos) de la relación rota, de no saber reconducir algo que viene de muchos años atrás y que se ha ido apagando sin saber ninguno cómo. Es verdad que la personalidad de ambos choca en ciertos aspectos, pero Catherine era su amor, y haberla perdido es algo que no ha superado y que le hunde por dentro.

El guión de Jonze me ha parecido una maravilla, con mucho subtexto de donde rascar: ¿Cómo afectan a nosotros mismos y a nuestras relaciones nuestras propias expectativas vitales? ¿Sabremos cómo afrontarlas? ¿En un mundo tan tecnificado y frío es posible amar verdaderamente? ¿Qué es el amor? ¿Es algo preprogramado? ¿Se aprende sobre él y de él sobre la marcha? ¿Es posible el amor sin sexo?

La verdad es que es una cinta que hay que dejarla reposar. Que crezca en la cabeza durante unas horas o incluso algunos días. Da para el debate. Da para pensar.

Maravillosa.





Nuevo trailer de Exodus

Y como hoy la cosa va de trailers, aquí teneis el último trailer de la nueva peli de Ridley Scott, Exodus, que en cais 3 minutos te resume la peli (así que eso que os ahorrais).

Básicamente, la historia de Moisés (one more time) con un tono épico a lo Braveheart/Gladiator...



Just in time for Christmas... Qué bonita es la Navidad.

Trailer final de Interstellar

Aquí os dejo el trailer final de Interstellar, la cinta con la que Nolan pretende ganar su Oscar desesperadamente.

Spielberg + Kubrick... O eso parece. A saber. A partir del 7 de Noviembre (desde el 5 en IMAX en USA y Canadá):